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Un 74% de la población española está a favor de aumentar la inversión pública en vivienda, incluso si ello conlleva un aumento de impuestos

La gran mayoría de la ciudadanía española está a favor de aumentar el gasto público en vivienda social: tres de cada cuatro personas consideran que las administraciones públicas deberían invertir más en vivienda. También hay amplio apoyo en un aumento del gasto de salud y cuidados de larga estancia. Estas son las conclusiones que se extraen del último Eurobarómetro de febrero de 2023.

En la última edición de la encuesta de opinión pública europea, se preguntó a la ciudadanía sobre su opinión acerca de la política de vivienda de las administraciones y los resultados fueron claros: en España, un 74% de la población quiere mayor gasto en vivienda. Además, el 62% de las personas encuestadas considera que este incremento del gasto debe cubrirse mediante impuestos.

Estos resultados reflejan la preocupación de la sociedad española por la situación de la vivienda en el país. El acceso a una vivienda digna es un derecho básico y fundamental, pero en los últimos años se ha producido un aumento de los precios de la vivienda y una disminución de la oferta de vivienda social. Esto ha provocado un aumento del número de personas en situación de sinhogarismo y una precarización de las condiciones de vida de muchas personas.

Un 85 % pide mayor inversión en salud

Además de la preocupación por la vivienda, el Eurobarómetro también reveló que un 85% de las personas encuestadas en España considera que la administración pública debería gastar más en salud y un 76% en cuidados de larga estancia. Este dato no es sorprendente, dado el impacto que la pandemia ha tenido en el sistema sanitario y que ha puesto en evidencia la necesidad de reforzar los servicios de salud y cuidados, y la ciudadanía está demandando más inversión en este ámbito.

No obstante, es importante destacar que la salud no puede separarse de la vivienda, especialmente cuando se trata de la recuperación de las personas. Un hogar saludable es fundamental para mantener una buena salud, y un espacio de recuperación de calidad puede marcar la diferencia en la recuperación de una persona enferma o en situación de vulnerabilidad, como en el caso de las personas sin hogar.

Por lo tanto, es fundamental que se invierta en políticas de vivienda y salud de manera conjunta, para garantizar que todas las personas tengan acceso a una vivienda digna y saludable, así como a los servicios sanitarios y de cuidados necesarios para mantener su bienestar.

Mayor inversión de las administraciones públicas

El hecho de que la mayoría de la ciudadanía española apoye políticas de vivienda más ambiciosas es una señal clara de que la sociedad está preocupada por esta problemática y demanda soluciones por parte de las autoridades. Es necesario que los gobiernos dediquen más recursos y esfuerzos a garantizar el acceso a la vivienda y a prevenir el sinhogarismo.

En definitiva, los resultados del Eurobarómetro muestran que la ciudadanía en España está demandando más inversión en vivienda, salud y cuidados de larga estancia. Esto debería servir como una llamada a la acción para las administraciones y los responsables políticos de todos los niveles, para que adopten políticas y medidas que aborden estas necesidades de manera efectiva y justa.

La Ley de Vivienda, que se está negociando actualmente, es una oportunidad única de considerar estas necesidades y las demandas ciudadanas. En particular, los datos sobre vivienda y salud muestran la importancia de adoptar políticas integrales que aborden las necesidades de las personas desde una perspectiva integral y desintitucionalizadora, reconociendo la estrecha relación entre la vivienda, la salud y el bienestar en general.