Litigio estratégico en aporofobia: primera parada, Gijón.
Cuenta una leyenda que primero fueron las palabras y fueron ellas quienes crearon las ideas, los objetos, los seres y los sentimientos, y que la vida sólo es su molde, su parte visible. Las palabras emergen y tejen historias, las historias vidas y, a su vez, tejen realidad. Así, en este deambular de palabras e historias, en el camino de HOGAR SI hemos sumado una a nuestra estrategia de trabajo, aporofobia.
La realidad no es nueva, la palabra sí. Una palabra revolucionaria que en 1995 llegó a nuestras vidas para cambiar la realidad social y señalar esa fobia que representa el miedo y criminaliza la pobreza. Una realidad que arrastraba consigo continuas denuncias sociales, policiales y judiciales y que, por insólito que parezca, su mayor presencia estaba en textos académicos y artículos publicados en medios de comunicación.
La Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea prohibió toda forma de discriminación, entre otras por razones de patrimonio. La fiscalía general del Estado en 2015, además, propuso agravar las penas que debían imponerse a aquellas personas que actuaban contra las víctimas por su situación de exclusión o de pobreza. Incluso el término llegó a colarse en las sentencias de los Tribunales de Justicia. Pero, a pesar de ello, todo este desierto sin nombre era una “rara avis” que no se podía denunciar, ni mucho menos defender. Hubo que aguardar hasta el año 2017 para que “aporofobia” fuera reconocida por la RAE, y pelear, y mucho, para que adquiriera naturaleza jurídica y anclaje en ordenamiento jurídico español. No fue hasta 2021, después de un largo trabajo, cuando finalmente se consiguió.
Ahora que tenemos las vías legales, la lucha es otra: que se aplique en los Tribunales y se expanda entre nuestra sociedad. La herramienta de Litigio Estratégico es ideal para este cometido. En esta ardua tarea nos encontramos sumergidos los equipos de CAUSA y LEGAL. En dejar huella en una nueva forma de litigar, en hacer uso de la herramienta de Litigio Estratégico para fomentar las denuncias, las actuaciones de los servicios policiales y las fiscalías, y visibilizar la violencia gratuita hacia las personas en situación de sinhogarismo. Queremos usar el Litigio Estratégico para romper las barreras burocráticas que impiden ver el final del camino, para abrir conciencias que provoquen cambios estructurales sobre realidades injustas y para abrir debate y conciencia social sobre un problema, el sinhogarismo, que es una vulneración de derechos que tiene solución.
En ello estábamos y estamos cuando hace ya un año, en la ciudad de Gijón, hubo una agresión a una persona que dormía en un portal de un edificio. Como no podía ser de otra manera, se denunció, la denuncia llego a los Juzgados de Gijón, que abrió Diligencias Previas por entender que era un delito de odio, así lo califica. Por vez primera HOGAR SI entregó mandato a su departamento legal, que contó con el apoyo del equipo del Observatorio Hatento, para personarse y ser parte penal en el Procedimiento judicial. Actualmente, y por primera vez, HOGAR SÍ es parte penal en la defensa de la víctima. Todo esto se produce en el marco del proyecto “Litigio estratégico contra la aporofobia: combatiendo la infradenuncia” financiado con fondos procedentes de la convocatoria de subvenciones para la realización de actividades de interés general consideradas de interés social, correspondientes a la Secretaría de Estado de Derechos Sociales.
El caso de Gijón es un claro ejemplo que evidencia la normalización de la infradenuncia y la infradetección de los delitos de odio. De no ser por la indignación ciudadana que creó este caso y esta intensa y concienzuda línea de trabajo, esta vulneración de derechos podría haberse visto invisibilizada o pasada por alto como desgraciadamente sucede en muchas ocasiones. Nos ha llevado un año de trabajo que el Juzgado de Instrucción 5 de Gijón nos admitiera como parte en el procedimiento penal. No ha sido fácil, y no podemos prever el resultado final, pero sin duda este paso ya es en sí mismo esperanzador y nos señala el útil camino que nos depara el litigio como herramienta de defensa de los derechos humanos.
Para todos nosotros, la víctima y el enfoque de derechos aplicado a la causa del sinhogarismo son nuestro estandarte, actúan como una de esas rocas solidas que sobresale en medio de la corriente de un rio y nos indica que, por ahí, pisando con seguridad, cruzaremos al otro lado, pasaremos a la otra orilla. En ese otro lado buscaremos con esa nueva forma de litigar una condena que consiga la reparación de la víctima con dignidad.
Financiado por