RAIS lamenta que el Gobierno haya descartado la incorporación de medidas específicas para erradicar el sinhogarismo en el Plan de Vivienda
El pasado viernes 9 de marzo, el Consejo de Ministros ha aprobado el Plan Estatal de Vivienda 2018-2021 que destina 1.443 millones de euros para las políticas públicas de vivienda. Esta cifra supone un 0,03% del PIB. España es, junto con Chipre y Malta, uno de los países de la UE que menos invierte en ayudas para vivienda frente a la inversión que realizan otros países de nuestro entorno como Reino Unido (1,41%), Francia (0,83%) o Alemania (0,59%) según datos de la OCDE.
Parecería lógico que el Plan Estatal de Vivienda incluyera medidas específicas para facilitar el acceso a una vivienda de aquel colectivo que, precisamente, definimos y nombramos por la ausencia de la misma: las personas sin hogar. Sin embargo, y pese a las propuestas realizadas en ese sentido, el Gobierno ha descartado esta posibilidad.
Consideramos imprescindible y urgente que el Gobierno de España asuma que la política social de vivienda debe dirigirse prioritariamente a aquellas personas con mayores necesidades de apoyo para acceder al alojamiento normalizado. En este sentido, el Gobierno no puede obviar la situación de las personas sin hogar como máximo exponente de la exclusión residencial. La política social de vivienda debe tener como primer objetivo que ninguna persona viva en la calle. Lamentamos profundamente que el Plan de Vivienda recientemente aprobado no haya incorporado, como se propuso, un plan específico para erradicar el sinhogarismo. Aunque las personas sin hogar aparecen en el artículo 7.4 como parte del colectivo de sectores preferentes, las condiciones de acceso a los programas de ayuda –entre ellas ser titular de un contrato de alquiler en vigor– imposibilita de facto el acceso de las personas sin hogar a la cobertura del Plan.
A lo largo de 2017, RAIS presentó tanto al Gobierno de España como a los distintos grupos parlamentarios del Congreso de los Diputados un documento de propuestas para que el Plan Estatal de Vivienda incorporara un Programa Específico de Abordaje del Sinhogarismo. Este Programa habría facilitado no solo el desarrollo de la Estrategia Nacional Integral para Personas Sin Hogar (2015-2020) que se encuentra sin dotación presupuestaria, sino que de una manera específica habría fomentado el acceso de las personas sin hogar a las políticas y planes de vivienda de las distintas CCAA. A su vez hubiera supuesto un primer paso para alcanzar el objetivo de erradicación del sinhogarismo. Mientras en España el problema crece, varios países de Europa están consiguiendo reducciones significativas de este fenómeno apostando por políticas de vivienda dirigidas directamente a las personas sin hogar. Políticas que están generando evidencias de que es posible acabar con el problema.
La propuesta de RAIS de incorporar un Programa Específico de Abordaje del Sinhogarismo contempla tres líneas de actuación:
- PROPUESTA 1. Ayuda al alquiler para personas en situación de sin hogar, cuyo objeto sería facilitar el acceso al disfrute de una vivienda digna y adecuada, en régimen de alquiler, a personas en situación de sin hogar usuarias de los recursos de alojamiento de las redes de atención al sinhogarismo.
- PROPUESTA 2. Apoyo al desarrollo de programas Housing First, dirigidos a la erradicación del sinhogarismo más extremo de calle, mediante el otorgamiento de ayudas al alquiler de viviendas individuales.
- PROPUESTA 3. Reconversión de infraestructuras de la red de atención a personas sin hogar, cuyo objeto sería la financiación de obras de rehabilitación de las infraestructuras de alojamiento colectivo de la red de atención a personas sin hogar, con el objetivo de convertirlas en recursos de alojamiento para dar respuesta a necesidades específicas de atención del sinhogarismo.
El sinhogarismo es un fenómeno muy complejo que tiene su raíz en la desigualdad económica, la exclusión social, la falta de acceso a derechos básicos y la invisibilidad de las personas que lo sufren. Pero es la imposibilidad de acceso a una vivienda lo que marca de manera definitiva la situación de exclusión de las personas sin hogar. Resulta descorazonador que este Plan, que estará en vigor en los próximos cuatro años, no tenga entre sus objetivos que ninguna persona en España viva en la calle.
Perdida la oportunidad del Plan Estatal de Vivienda, el Gobierno de España tiene una segunda posibilidad de acometer medidas concretas para erradicar el sinhogarismo: incorporar en los próximos Presupuestos Generales del Estado (PGE) una partida específica para la dotación presupuestaria de la Estrategia Estatal Integral para las personas sin hogar. Tanto el Gobierno como los principales partidos políticos han recibido una propuesta concreta de RAIS en este sentido y cuentan además con una PNL (Proposición No de Ley) aprobada por unanimidad en el Congreso de los Diputados que les insta a hacerlo. Es ilógico que el Plan de Vivienda no tenga medidas para las personas sin hogar. En el caso de los PGE sería inexplicable que no cumplieran lo que todos los partidos políticos, incluido el del Gobierno, han aprobado en el Congreso.